28 de marzo de 2018

Mirror. El reflejo de la montaña, por Emma Ríos y Hwei Lim



Título: Mirror
Guionista: Emma Ríos.
Dibujante: Hwei Lim.
Páginas: 176.
Precio: 19€.
Editorial: Astiberri.












¿Cómo no íbamos a hablar de esta historia? Tiene una portentosa mezcla de magia y ciencia ficción y está guionizada por la simpar y simpatiquísima Emma Ríos. Ya tenía ganas de catar algo de esta autora como guionista, más allá de su escueto I.D., así que hablemos un poco de lo que ha imaginado aquí...

Irzah es un asteroide que alberga una colonia humana particular, ya que en ella (y gracias a ella) se han producido los primeros animales capaces de pensar y sentir como humanos. La almirante Elena Hagia y el alquimista Kazbek Abkhazhi dedican sus esfuerzos a replicar el milagro natural de estos animales sintientes en experimentos que llevan a los sujetos de pruebas hasta el límite. La empatía que un talentoso aprendiz de la alquimia, Iván, siente por estos sujetos puede llevar al colapso de un sistema sostenido en un medio natural que ya se encontraba en las últimas.

Con esa premisa, se configura en Mirror un mundo imaginativo y amplio, con unas reglas y una fantasía propias de un cuento o una novela juvenil. Desde luego, en este primer tomo el tono ratifica esa orientación más juvenil, aunque tiene posibilidades de cambiar y desarrollarse en otros estilos según los personajes ganen complejidad. Además, tiene la clara intención de transmitir un interesante mensaje sobre las relaciones de poder, las diferencias y la discriminación, que todavía está por madurar, pero que ya se asienta aquí como más complejo que una formulación de absolutos.
Podemos devolverles la mirada, pero sólo fingirán verse en un espejo. No somos humanos. No somos personas. Sólo somos un reflejo.
-Es sólo una parte de un monólogo magistral.

Otro elemento que nos conecta con ese tono es el dibujo. El tebeo está lleno de personajes adorables, expresiones que se acercan a lo oriental y un coloreado infantil nos orientan a lo juvenil de la historia. Y al mismo tiempo, este dibujo se aprovecha de esas ilustraciones narrativas que difuminan las viñetas tan propias de la propia Emma Ríos cuando dibuja. Sí, es verdad, probablemente la propia Ríos me hubiese gustado más dibujando aquí. Tengo más afinidad por su estilo y me parece bastante más espectacular, pero bueno, Hwei Lim no hace un mal trabajo y resulta adecuado para la historia.
El choque entre
Custodia y Zun.
 No podrían ser más diferentes,
pero Irzah produce toda clase de seres.
Por otro lado, el hecho de que Emma Ríos se dedique al guión y tenga oportunidad de crear personajes tan interesantes como los que tiene este cómic. Es algo que ya demostró en ID, aunque sin desarrollarlos demasiado, y que aquí lleva a un nivel superior no sólo por meterlos en una trama más compleja, sino por la cantidad de ellos que hay. Una plétora de personalidades que se definen y presentan bastante bien en este tomo, aunque en algunos casos no hay espacio para llevarlos demasiado lejos. A mí me duele especialmente el caso de Custodia, un personaje que claramente necesita más espacio. Pero bueno, por algo es una primera parte. Esperaré ver más de ella.

Porque tampoco son pocos los que se apuntalan mejor en el poco espacio que da este tomo. Y es gracias a ellos que el mensaje sobre las diferencias y el poder presentado aquí gana complejidad. Claro, hay personajes hechos para ser empáticos claramente y tener menos dobleces, como Iván o Zun; pero otros como La Orca Guardiana o el propio Kazbek son más grises y es interesante comprobar cómo van desplazando sus lealtades y opciones por este conflicto ideológico según se van conformando. El gran ejemplo de todo esto es Aldebarán, que sería claramente mi personaje preferido por la forma en que evoluciona, nunca en ningún extremo, siempre con dudas pero coherente con lo que sabemos de él.

Todas estas historias personajes conducen hacia un final que deja una extraña sensación. Por un lado, el sentimiento a la conclusión de la historia es de que se ha cerrado un círculo. Sin embargo, ni siquiera queda claro del todo lo que ha pasado con Irzah al final y, como ya he dicho, son inevitables las ganas de saber más de los personajes. Sin duda, tienen la posibilidad de hacer una historia grandiosa y fascinante con los mimbres que aquí se presentan si todo queda bien cerrado y la enorme cantidad de piezas del puzzle que se han ido mostrando aquí encajan finalmente. Sin embargo, si no fuese así, este primer tomo seguiría siendo destacable.

Antes de cerrar con una conclusión general, tengo que mencionar los extras del tomo, compuesto de ilustraciones e historias cortas. En general es algo anecdótico y curioso, aunque en algunos casos te puede servir para conocer más a los personajes. Se nota que, en muchos casos, sirve para jugar con personajes que no han interactuado tanto en la historia principal y poder ver esas interrelaciones innecesarias pero interesantes.
O, por lo menos, divertidas.
Así que Mirror vale mucho por lo que empieza, motivo por el que habrá que ver cómo acaba para valorarlo enteramente. No obstante, pese a la gran ambición de esta historia, va por un buen camino e incluso tiene cierta engañosa conclusividad emocional, por lo que merece la pena por lo menos asomarse a este tomo y presenciar el nacimiento de todo un universo de ficción.

PUNTUACIÓN:
Ω Ω Ω Ω

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Comenta, opina y discute de lo que te parezca, pero sin perpetrar ningún acto villanesco. Superhéroes suelen merodear estos lares.