19 de mayo de 2013

El Aleph, por J.L. Borges




Título: El Aleph.
Autor: Jorge Luis Borges.
Editorial: Muchas, Destino o Debolsillo, por ejemplo.
Páginas: Sobre 200.
Precio: Para mí gratis en LibrosLibres, pero las ediciones más baratas rondan los 10€.

(Se nota un poco en la descripción que ya no tengo el libro en mi haber, pero bueno, sé que podéis perdonarlo)





Veamos si acierto a definir este libro de alguna forma:

El Aleph es un conjunto de relatos tan intrincados como simples que están diseñados para hacer que tus neuronas vaguen por el laberinto(siempre hay un laberinto) de carne que es tu cerebro, recogiendo referencias culturales y arrojándolas al mismo lugar que los sucesos mundanos para conformar un camino errático y circular que prefigure el infinito. Vale, me dejaré de grandilocuencia, baste decir que es el libro de relatos más famoso del escritor argentino, incluyendo diecisiete narraciones bastante cortas pero desde luego intensas, llenas de un contenido cargado de ciencia ficción, metaficción, metafísica y, por raro que parezca, hasta cotidianidad. Una mezcla variada en su concepción que deriva en una similar temática.
Vizcarra dibuja a Jorge Luis Borges
Lo primero que llama la atención de los relatos de El Aleph es que su extensión es mínima. Hay relatos que incluso abarcan una sola página. Sin embargo, no por cortos se leerán más rápido, y de hecho es posible que en muchos se deba releer algún fragmento para comprender mejor la idea que el autor pretende transmitir. Esto sucede no tanto por la abundancia de sucesos de los relatos sino más bien por la complejidad de los mismos. En muchos casos se nos narrará un acontecimiento nimio, que apenas tenga relevancia, pero su enorme trasfondo es el que dará profundo significado y construirá de ello una historia. También darán mucho peso a los relatos las abundantes referencias culturales, ya que los relatos están plagados de menciones a la historia, la biología, la mitología o la religión, pero suele ser con una explicación añadida que hace que incluso los menos duchos en las materias mencionadas no se pierdan. Es algo excepcionalmente difícil, pero diría que Borges consigue con esto acercar esos conceptos tan profundos y simbólicos a toda clase de personas, sea cual sea su bagaje cultural.
"Que el cielo exista, aunque nuestro lugar sea el infierno."
Otto Dietrich zur Linde

Otra de las sorpresas que me encontré al leer por primera vez al autor fue con su narrativa, que no puedo calificar de otra forma que no sea de extraña. Analizándolo, supongo que adapta la forma de narrar a la temática particular y a la voz desde la que se cuenta cada relato. En ocasiones es vibrante y sonoro, en otras descriptivo y a veces parece una crónica histórica desordenada por la falta de memoria del cronista. Pero siempre contiene una cadencia que, ya sea por el carácter misterioso, místico o filosófico de lo narrado, o por la excéntrica manera de escribirlo en sí, te empuja inexorablemente a seguir leyendo hasta un final que suele retorcerte la mente. Porque la temática profunda que habitualmente se hunde en la metafísica está claro que no puede conducir a otra cosa que a esos finales que en muchos de los relatos conllevan una revelación que produce una reflexión trascendental o un vuelco que deja todo lo dicho hasta ahora patas arriba.
"Según la doctrina idealista, los verbos vivir y soñar son rigurosamente sinónimos; de miles de apariencias pasaré a una; de un sueño muy complejo a uno muy simple."
Narración en El Zahir

De entre todo ese batiburrillo de ideas abstractas y conceptos complejos, mi relato favorito es precisamente el primero, El Inmortal, que supone un primer choque frontal con esa peculiar narrativa de Borges y cuyas referencias históricas me encantaron tanto como la sucesión de hechos místicos e ilusorios que se describen. Otros relatos que me gustaron especialmente fueron La busca de Averroes (ambientando en una Córdoba califal y un ejemplo certero de esos relatos en los que sucede poco pero se cuenta mucho), La casa de Asterión (que  recurre a una referencia clásica grecolatina que no había sabido ver en un primer momento... muy disfrutable en una segunda lectura), Deustsches Requiem (los pelos como escarpias. Y qué final. Bravo) o Abenjacán el Bojarí, muerto en su laberinto (un concepto mucho más simple de cómo el argentino lo cuenta...y que por eso me encanta. Parece una historia que fue excluida por ser demasiado extraña de Las mil y una noches). Pero ya digo que cada relato es una sorpresa y un nuevo repaso a algún nuevo concepto filosófico o místico, sino es que presenta ambos.
"Ser inmortal es baladí; menos el hombre, todas las criaturas lo son, pues ignoran la muerte; lo divino, lo terrible, lo incomprensible, es saberse inmortal."
Narración en El Inmortal

Sin embargo, con mucho pesar debo decir que el relato que da nombre al libro, El Aleph, me ha dejado una sensación más agridulce que un cerdo chino. Llevaba mucho tiempo queriendo leérmelo, desde hace años me lo estaba reservando para poder leerlo en papel y bien. Sin embargo, en este tiempo ya me he enfrentado a este concepto borgiano del aleph en varios lugares, de modo que ya sabía perfectamente lo que era antes de comenzar a leer el susodicho relato, y creo que eso ha tenido mucho que ver en la impresión que me ha causado. Yo me esperaba encontrar con un relato que contase algo más, pero al comenzar a leer vemos que el principio del relato apenas presenta las circunstancias en que Borges se encuentra con el Aleph. Estas primeras páginas no dejan de ser interesantes y amenas de leer, aunque claro, un servidor estaba esperando constantemente la aparición del fenómeno que da su nombre al libro. Y cuando aparece, simplemente se describe. Y yo, que ya tenía esa lección más que aprendida, pues me decepcioné un poco, a pesar de que la deliciosa narrativa de Borges no deja que dejes de disfrutar de lo leído y a que también se añada todo ese maremágnum de referencias y filosofía con el que el autor carga cada relato.
"Todo lenguaje es un alfabeto de símbolos cuyo ejercicio presupone un pasado que los interlocutores comparten; ¿cómo transmitir a los otros el infinito aleph, que mi temerosa memoria apenas abarca?"
Narración en El Aleph

Pero esto es más una impresión personal ante este relato en particular debido a las expectativas que me había generado yo mismo y que no me impide ver que me encuentro ante uno de los narradores más peculiares y geniales que haya leído y ante uno de los mejores libros de relatos, sino el mejor, que se haya escrito en la historia. En fin, una delicia de libro que ya tardáis en leeros los que no lo hayáis hecho ya.

PUNTUACIÓN:
Ω Ω Ω Ω Ω

6 comentarios :

  1. Yo creo que leer jorge luis borges es un reto. el relato "el aleph" esta lleno de cosas complicadas pero realmente vale mucho la pena

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    1. En cierta forma, es un reto, pero no deja de ser disfrutable a cada palabra. Ya dije que tuve que releerme algunas páginas para comprender todo el significado que encerraban, pero es tan y tan fácil releer algo tan bien escrito que, como dices, vale y mucho la pena.

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  2. Yo siempre que leo a Borges me quedo con una sensación como neblinosa, como si supiera que detrás de esa maraña de conceptos y de metafísica hay algo que cuesta la pena ver (y que, sin embargo, está ahí). Creo que los relatos de Borges son de esos que tienes que leer de uno en uno y pararte un rato a descansar o a pensar en lo que acaba de pasar para conseguir disfrutarlos.
    Mi favorito es "Las ruinas circulares", que viene en "Ficciones" (es muy sencillito, y sin embargo, brillante).
    Por cierto, me encanta el nombre del blog :)

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    1. Sin duda, lo mejor con él es ir despacio para asimilar lo que acabas de leer. En ocasiones es más o menos fácil descubrir lo que te está diciendo, pero hay otras cuyo significado se te escapa y, a lo mejor, recordándolo después caes en algo que te hace comprenderlo de forma mucho más profunda y en ese momento te das cuenta de que es un escritor impresionante.
      No he leído Ficciones aún, pero a no mucho tardar caerá, y muy probablemente caigan nuevas reseñas sobre Borges.
      ¡Gracias por las alabanzas! En realidad no está muy pensado, pero creo que es un nombre efectivo.

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  3. Lo mejor de leer a Borges es que puedes leerte cinco veces el mismo cuento y saberlo en cada relectura como si fuera la primera.

    Recomiendo por 25 euros la recopilación de todos sus obras en prosa, y por otros 25 su poesia recopilado, por 50 euros tienes todo lo de este mágnifico escritor.

    PD: para mi el mejor cuento es la biblioteca de Babel.

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    1. Coincido plenamente. Releer a Borges te hace sentir como cuando descubres ese rincón repleto de tesoros que se encuentra en la esquina de un lugar en el que has vivido por años.

      Es una buena opción, aunque yo por ahora me he pillado gratis dos de sus libros de relatos a través de intercambios y sitios donde los regalaban y me queda un tercero, que probablemente ya me compre. A su poesía me acercaré con miedo, porque no sé bien como su prosa puede adaptarse a la belleza y la fluidez que exige un ritmo lírico, pero desde luego le daré una oportunidad aunque sea superficial.

      Cogeré con ganas el relato que dices cuando lo pille, entonces.

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