29 de diciembre de 2012

Constitución española de 1978, por varios autores



Título: Constitución española
Autores: Manuel Fraga Iribarne, Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, José Pedro Pérez-Llorca, Gabriel Cisneros Laborda, Gregorio Peces Barba, Jordi Solé Tura y Miquel Roca i Junyent.
Editorial: Tecnos
Páginas: 38
Precio: 8,90 (o gratis)






Hace poco que me he leído este fabuloso ejemplo de literatura castellana y me ha causado una impresión tan y tan honda que no puedo hacer otra cosa que compartirlo con vosotros, queridos lectores. Aquí viene la sinopsis:

En una España anacrónica, distópica, post-apocalíptica, cyberpunk, indie y con ciertas influencias del rock progresivo que comenzaba a surgir en la época, una serie de artículos se atreven con el valor de una mosca que se revuelve a punto de ser devorada en la telaraña a disponer el ordenamiento jurídico de la nación española. El trágico devenir de su lucha reunirá a una serie de personajes tan estrafalarios como un rey inviolable, un defensor del pueblo o un presidente del gobierno(claro alivio cómico de todo el argumento), que se moverán a lo largo de toda la historia por un mundo plagado de competencias, derechos, deberes y libertades individuales.


Muchos críticos literarios al analizar esta obra se han quedado en la superficialidad de declararla una mera obra cómica que trata con simpleza de poner en escena una vil sátira de la sociedad española entre sus líneas plagadas de bellos y estilísticos tecnicismos jurídicos que harían vomitar a un poeta cuerdo si éste llegase a existir. Sin embargo, adentrándonos más en la intrincada trama que se esconde tras cada artículo descubrimos una historia de amor, desamor, venganza, amistad, acción y alegatos a favor de los derechos sociales de los enanos con las cejas muy juntas y los pies planos, grandes olvidados históricos en la historia de la reivindicación política. Aparte de esto, en un afán de profundización aún mayor podemos observar como la Constitución refleja las fobias, manías, vivencias y carencias de sus siete redactores. Baste señalar, por poner uno de los múltiples ejemplos, ese verso en el que sucintamente Jordi Solé Tura declara su amor ante Manuel Fraga empleando para ello una lírica casi erótica que nos deja testimonio del apasionado y prohibido romance que ambos personajes históricos mantuvieron en secreto, ubicado en el punto 2 del artículo 138:
“Con el mismo fin se dispensará un tratamiento especial a las zonas de montaña.”
Jordi Solé Tura, comunista enamorado 

Y no podría irme sin mencionar las magníficas ilustraciones que se hayan incluidas en esta maravillosa obra de la literatura retrodependiente de habla hispana. Cada una de ellas refleja los profundos sentimientos que las palabras son incapaces de describir y que, por supuesto, complementan con fidelidad y arrojo las maravillosas ideas que se desarrollan a lo largo de la historia formando un conglomerado unitario que lleva a la exquisitez suprema y total. Los estilos de estos dibujos varían desde unas arriesgadas formas experimentales que logran gran calado hasta una pintura más clásica que es ejecutada con una destreza sin igual.
Detalle del delicioso arte interior.
Sin palabras.
Excepto estas.
Estas sí.
Pero ni una más.
Ni siquiera una de esas pequeñitas como "en" o "Copérnico"
Sí es cierto que podríamos decir, por tratar de señalar algún aspecto negativo, que es una Constitución algo falta de originalidad, ya que se la ha acusado de ser un reflejo menos radical de su precedente histórico, la Constitución de 1931, de lectura obligatoria para todos aquellos amantes del neorrallysmo cubista, o de tener un argumento básicamente calcado al de la Ley Fundamental de Bonn(un gran autor, ese tal Bonn, por cierto). No obstante, pese a que copia estructuras y repite algunos de los clichés del género, creo que nos hayamos ante una de las obras maestras más destacadas dentro del mismo que además puede atraer también a lectores que no estén familiarizadas con él.

Como conclusión sólo puedo decir que ya estáis tardando en adquirir esta preciosista obra de arte. Si os gustó El juego de Ender de Orson Scott Card os tiene que gustar este libro.

PUNTUACIÓN:
Ω Ω Ω Ω Ω

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